Llegamos tempranito a Cracovia, después de un gran madrugón
Una vez instalados en el Hotel, salimos q tomar contacto con esta maravilla de ciudad.
Comimos en el Restaurante Hawelka, en plena Plaza Mayor, probamos los lobys (helado típico), paseamos por sus maravillosos parques…y acabamos el día cenando en un Restaurante precioso a la luz de las velas
¿Qué más se puede pedir para un primer día en Polonia?
Sigue nuestro viaje en nuestras redes sociales
wegoaz.com